Para ti, el hombre de mi vida, mi amor...

(Pon la canción mientras lees)

Cada día me levanto pensando lo mismo, "¿quién lo diría?". Saber que en un momento pensé que algo así no pasaría, que no viviría esta sensación, se convirtió en un tema ajeno, pensando que no lo merecía. A pesar de todo, mantuve mi corazón limpio, a pesar de todo fui paciente, a pesar de todo esperé; te esperé. Ahora entiendo aquello que dicen: "las cosas llegan en el momento indicado", que "el tiempo de Dios es perfecto", que ahora somos perfectos, dentro de nuestra imperfección. Que bello saber que pedí lo que soñaba, que encontré lo que buscaba, que soñaba lo que encontré. Que rápido llegaste, que rápido revolcaste mi vida, que rápido todo cambió. Pasé de dedicar letras a los que tomaban trenes lejos de mi, a dedicarle las mismas a alguien que llegó en barco por mi. Y allí entendí, que el viaje sola es lindo, pero acompañada es mejor. Que tenemos miles de años para recorrer kilómetros juntos, solos, con otros, con nosotros. El mundo sigue esperando que lo recorramos, al tiempo que te recorro a ti, te siento, te pienso, te huelo, te beso, te amo. Eres mío, soy tuya, eres tuyo, soy mía. Que bello coincidir en esta vida. Lo que viene, son aventuras, el barco nuestro espíritu y la bandera nuestro amor. Este es, nuestro libro de aventuras.